Con mucha esperanza he visto el desarrollo del paro de profesoras y profesores durante este mes. Esperando, como desde siempre, que finalmente quienes están en las aulas se hagan cargo de la educación y las propuestas para mejorar las condiciones provengan justamente de los expertos. Que los conceptos económicos pasen a un segundo plano y la antropología y la filosofía formen parte de los planes curriculares. Que la historia no se convierta en asignatura secundaria y la educación física tampoco.
A medida que transcurren los días me cuesta creer que será posible, la educación tomó un rumbo impensado por las y los educadores desde los 80 y la reversa o la transformación hacia una calidad educativa no cifrada en SIMCE, PSU han convertido este estilo educativo en un muro difícil de derrumbar. Al igual que la desigualdad instaurada desde inicios de la república y acentuada de manera vergonzosa desde 40 años a la fecha.
Finalmente pienso que todo intento vale y tanto va el cántaro al agua que al final se rompe, adelante profesoras y profesores, a seguir proponiendo una educación igualitaria, de calidad y accesible a todos. A no bajar los brazos.
A medida que transcurren los días me cuesta creer que será posible, la educación tomó un rumbo impensado por las y los educadores desde los 80 y la reversa o la transformación hacia una calidad educativa no cifrada en SIMCE, PSU han convertido este estilo educativo en un muro difícil de derrumbar. Al igual que la desigualdad instaurada desde inicios de la república y acentuada de manera vergonzosa desde 40 años a la fecha.
Finalmente pienso que todo intento vale y tanto va el cántaro al agua que al final se rompe, adelante profesoras y profesores, a seguir proponiendo una educación igualitaria, de calidad y accesible a todos. A no bajar los brazos.
Comentarios
Publicar un comentario